sábado, 9 de abril de 2016

Discapacidad intelectual y causas orgánicas.


Discapacidad intelectual y causas orgánicas. 


La naturaleza de la etiología de la discapacidad intelectual es múltiple, se han llegado a identificar más de 250 causas que la originan. Según la AAIDD (2002) los factores etiológicos de la discapacidad intelectual pueden tener un origen: prenatal (aparecen antes del nacimiento, como por ejemplo, los trastornos cromosómicos), perinatal (se producen durante el nacimiento o poco después, como los trastornos respiratorios) y postnatal (se producen en los primeros meses o años de vida, como por ejemplo la encefalitis).






La discapacidad intelectual de etiología orgánica suele oscilar entre los niveles moderado y profundo, existiendo una correlación alta entre el nivel intelectual y el retraso biológico. Se puede decir que la patología aumenta al disminuir el C.I. 



Derivación ambiental de la discapacidad intelectual.

Derivación ambiental de la discapacidad intelectual.  

 

La discapacidad intelectual cuya etiología no viene determinada por factores biológicos, suelen asociarse a distintos tipos de deprivación psicológica, social y lingüística. 

La hipótesis de la «de privación sociocultural» (Deutsch, 1967) sostiene que las deficiencias cognitivas y verbales que presentan las minorías raciales y los sectores sociales empobrecidos tienen su origen en los déficits ambientales durante la primera infancia. La marginación y la pobreza por sí solas no son causas de déficits cognitivos y bajo rendimiento escolar, pero sí las circunstancias que las acompañan como la mala salud, la deficiente crianza infantil, la falta de estímulos adecuados y la sensación general de desamparo. Investigaciones realizadas confirman la hipótesis de que la discapacidad intelectual es una progresión intergeneracional en la que las deficiencias de estimulación social y educativa se transmiten durante la infancia a los niños que proceden de entornos con estatus socioeconómico desfavorecido.

Los factores que determinan la discapacidad intelectual de origen ambiental o psicosocial (según Greenwood, Hart, Walker y Risley, 1994) son: 
  • Escasos cuidados de los progenitores, que ocasionan un bajo desarrollo del vocabulario durante la primera infancia.
  • Prácticas educativas que generan pocos hábitos de estudio durante los años que dura el aprendizaje. 
  • Bajo nivel de rendimiento escolar, fracaso y abandono precoz. 
  • Descendencia propia y repetición del mismo patrón en la generación siguiente. 

Esta hipótesis ha sido apoyada por McDermott (1994) quien señala que «un amplio porcentaje de los casos de discapacidad intelectual se deben a causas ambientales, y sobre todo a condiciones desfavorables durante los primeros años de vida». 

Por otro lado, Grossman (1983) señala que un ambiente estimulador puede compensar tempranos déficits de organismos inmaduros; para niños deprivados, el impacto de factores biológicos y sociales es aditivo. 

Investigaciones actuales demuestran con claridad que los efectos de la deprivación sociocultural pueden ser modificados y compensados, en gran parte, por medio de programas de enriquecimiento cognitivo (Feuerstein y cois. 1980; Zigler y Styfco, 1995).

domingo, 3 de abril de 2016

Alimentación intravenosa prolongada.

Alimentación intravenosa prolongada.


También denominada alimentación parenteral total (APT) es un método de alimentación que no pasa por el tubo digestivo. Se administran líquidos en una vena para suministrar la mayor parte de los nutrientes que el cuerpo requiere. El método se utiliza cuando una persona no puede o no debe recibir alimentos o líquidos por vía oral.
Si bien la APT puede salvar la vida de los bebés que no pueden recibir nutrientes de manera normal, esta técnica conlleva riesgos.
Debido al uso de APT o vías IV para recibir alimentación, los bebés pueden presentar los siguientes problemas de salud:
  • Problemas hepáticos.
  • Niveles de grasas, glucemia y electrolitos muy altos o muy bajos.
  • Septicemia (una respuesta grave ante la presencia de bacterias u otros gérmenes)

Malnutrición: Proteico energética.

Malnutrición: Proteico energética.


Se caracteriza por una ingestion alimentaria de proteinas y calorias insuficientes para cubrir las necesidades corporales. 

El diagnostico de Malnutrición proteico energética se suele realizar al comparar el peso corporal con la talla, según una tabla convencional, aunque también puede ser útil la evaluación de las zonas de tejido adiposo, de la masa muscular y del nivel sèrico de proteínas. Las victimas mas frecuentes de malnutrición proteico energética en todo el mundo son los niños. Un niño cuyo peso corporal es inferior al 80% del peso normal se considera malnutrido.
Existen 2 formas polares de malnutrición grave: 
  • Marasmo.
  • Kwashiorkor.

MARASMO: Desnutrición energética severa acompañada de emanización (flaqueza exagerada), caracterizada por una deficiencia calórica y energética. El marasmo se da dentro del primer año, se produce cuando la madre deja de amamantar al niño a muy temprana edad.

En los lactantes y niños pequeños, hay complicaciones graves asociadas con la desnutrición o marasmo. Una nutrición inadecuada puede dar lugar a retrasos en el desarrollo físico y mental de los pacientes. Algunas de las complicaciones más graves de marasmo sin tratamiento puede incluir:
  • La pérdida de fuerza
  • Problemas de crecimiento
  • Deformidad y destrucción de las articulaciones
  • La pérdida de la visión, que en última instancia puede conducir a la ceguera
  • Disfunción orgánica o insuficiencia
  • Inconsciencia
  • Coma
Algunas de las complicaciones puede dar lugar a secuelas permanentes o de largo plazo y dar lugar a problemas de desarrollo. En caso de anemia precoz masiva deficiencia de hierro y el deterioro extensivo de crecimiento, los pacientes pueden sufrir de desarrollo mental y físico permanente retardado. Evidentemente, cuanto más joven es el paciente en el momento de la desnutrición, los más devastadores los efectos a largo plazo son ser. En casos extremos, la falta de tratamiento puede incluso resultar en la muerte de un paciente. 

KWASHIORKOR: Se produce cuando la privación proteica es relativamente mayor que la disminución en la ingestión de calorías totales.
- Sintomas:
  • Cambios en la pigmentación de la piel.
  • Disminución de la masa muscular.
  • Diarrea.
  • Deficiencia en el aumento de peso y en el crecimiento.
  • Fatiga.
  • Cambios en el cabello (cambios en el color o la textura).
  • Aumento en el número y gravedad de las infecciones debido a daño en el sistema inmunitario.
  • Irritabilidad.
  • Abdomen grande que sobresale (protruye).
  • Letargo o apatía.
  • Pérdida de la masa muscular.
  • Salpullido (dermatitis).
  • Shock (etapa avanzada).
  • Hinchazón (edema).
El tratamiento oportuno generalmente lleva a obtener buenos resultados. El tratamiento del kwashiorkor en sus etapas avanzadas puede mejorar la salud general del niño; sin embargo, éste puede quedar con problemas físicos y mentales permanentes. Si no hay tratamiento o si éste llega demasiado tarde, la afección es potencialmente mortal. 
Pueden existir posibles complicaciones como: 
  • Coma.
  • Discapacidad física y mental permanente.
  • Shock.





Trastornos metabólicos: Anoxia cerebral.

Anoxia cerebral. 





Anoxia es la ausencia de oxigeno en las células y tejidos, o un aporte insuficiente. Cuando la anoxia se produce en el cerebro hablamos de “anoxia cerebral”. Se produce por disminución de flujo sanguíneo, insuficiencia de hemoglobina o por otras causas.
Cuando la Anoxia afecta al órgano más importante y vulnerable, el cerebro puede producir en escasos minutos daños de difícil o imposible recuperación, conllevando daños de muy diverso tipo, lesión cerebral, parálisis, retraso mental, epilepsia, dificultad de aprendizaje. 
Se puede producir en la llamada “adaptación al medio” en los partos. Cuando el feto debe cambiar su aportación de oxígeno a través del cordón umbilical y empezar a utilizar los pulmones.
Si este proceso se produce de forma errónea, debido a un parto prolongado o a una distocia entre el tamaño del feto y el canal de parto, o en niños prematuros, se llama “sufrimiento fetal” en ocasiones causado por una mala atención al parto o gestación o bien por una causa inevitable. 

Trastornos metabólicos: Deshidratación.

Deshidratación. 

Significa que el cuerpo no tiene el líquido suficiente. Eso puede pasar si se ingiere menos líquido del que elimina a través de vómitosdiarreafiebre o transpiración. La deshidratación puede ser leve y fácil de corregir, moderada, o severa y potencialmente mortal. Los bebés y los niños pequeños son más propensos a la deshidratación que los adultos. 

Los bebés pueden deshidratarse peligrosamente rápido.

Si el bebé sigue perdiendo más líquidos de los que ingiere, la deshidratación puede empeorar y llegar a producir manifestaciones graves como convulsiones o coma.

Sintomas: 

  • Ojos hundidos.
  • Disminución de la frecuencia de micción (pañales secos).
  • Puntos hundidos en la zona de la fontanelas de la cabeza.
  • Ausencia de lágrima al llorar.
  • Boca seca y/o pegajosa.
  • Disminución de la actividad física.
  • Mayor irritabilidad. 


Intoxicaciones por plomo y mercurio.

Intoxicaciones por plomo. 


La exposición prolongada al plomo, un mineral de origen natural que se utiliza prácticamente en cualquier cosa, desde los materiales de construcción hasta las pilas, puede provocar graves problemas de salud, sobre todo en los niños pequeños.
El plomo es tóxico para cualquiera pero los bebés que todavía no han nacido y los niños pequeños son los que más se exponen a padecer problemas de salud provocados por una intoxicación por plomo. Sus cuerpos, de menor tamaño y todavía en proceso de crecimiento, los hacen más vulnerables a la absorción y a la retención de plomo.
Las concentraciones de plomo en sangre son peligrosas, que pueden provocar una amplia variedad de síntomas, desde el dolor de cabeza y de estómago hasta problemas de comportamiento y anemia (cantidad insuficiente de glóbulos rojos en sangre). El plomo también puede afectar al desarrollo cerebral del niño.


La intoxicación por plomo puede ocasionar diversos problemas de salud en los niños, como los siguientes:
  • disminución del crecimiento óseo y muscular
  • reducción de la coordinación muscular
  • lesiones en los sistemas nervioso, renal y auditivo
  • problemas en el habla y el lenguaje
  • retraso del desarrollo
  • convulsiones y pérdida de conciencia (en casos de concentraciones de plomo muy elevadas)

Intoxicaciones por mercurio. 

El mercurio, al igual que el plomo, es un metal pesado y se almacena en el organismo.  Durante el embarazo, el mercurio puede llegar al bebé y causar trastornos en su desarrollo.

Los efectos tóxicos incluyen daños al cerebro, los riñones y los pulmones. El envenenamiento por mercurio puede provocar varias enfermedades, incluyendo acrodinia (enfermedad rosada), el síndrome de Hunter-Russell, y la enfermedad de Minamata.
La exposición al mercurio en los niños pequeños pueden tener graves consecuencias neurológicas, dificultando la formación de las vainas de mielina que recubren los nervios periféricos, pues el mercurio inhibe la formación de la mielina.

Estados epilépticos inducidos por lesión cerebral.

Estados epilépticos inducidos por lesión cerebral. 

La epilepsia con causas conocidas se denomina epilepsia secundaria o sintomática. Dichas causas pueden consistir en:
  • Daño cerebral por lesiones prenatales o perinatales (por ejemplo, asfixia o traumatismos durante el parto, bajo peso al nacer);
  • Malformaciones congénitas o alteraciones genéticas con malformaciones cerebrales asociadas;
  • Un traumatismo craneoencefálico grave;
  • Un accidente cerebrovascular que limita la llegada del oxígeno al cerebro;
  • Infecciones cerebrales como las meningitis y encefalitis o la neurocisticercosis;
  • Algunos síndromes genéticos;
  • Los tumores cerebrales.
Unos buenos cuidados prenatales, incluyendo el tratamiento de la tensión alta e infecciones durante el embarazo, pueden prevenir daños cerebrales durante el desarrollo del bebé, que conduzcan a una posterior epilepsia u otros problemas neurológicos. 

 

sábado, 2 de abril de 2016

Epilepsia mioclónica.

Epilepsia mioclónica. 



Síndrome de Aicardi, también conocida como “encefalopatía mioclónica infantil precoz”. Inicia antes del fin de la primera semana de vida, en neonatos sin antecedentes y cursa con mioclonías erráticas segmentarias y parcelares. Es un raro trastorno en el cual la estructura que conecta los dos lados del cerebro (llamada cuerpo calloso) está parcial o totalmente ausente. 

También pueden presentarse mioclonías masivas bilaterales, crisis parciales y, en ocasiones, espasmos tónicos. Las crisis se presentan tanto en vigilia como durante el sueño.
Este trastorno afecta unicamente a las niñas. 
El paciente presenta una importante afectación neurológica con hipotonía global e hipertonía de extensores, desconexión, signos piramidales o distonías; al tiempo se va estableciendo una microcefalia progresiva.
El síndrome de Aicardi puede ocurrir con otros defectos cerebrales.
Otros síntomas pueden abarcar:
  • Coloboma (ojos de gato)
  • Discapacidad intelectual
  • Ojos más pequeños de lo normal (microftalmia)

Sindrome de west o Espasmos infantiles.

Síndrome de west.


El Síndrome de West se denomina también de los Espasmos Infantiles y pertenece al grupo de lo que se llama "Encefalopatías epilépticas catastróficas". Los espasmos infantiles son un tipo especial de ataque epiléptico, que afectan fundamentalmente a niños menores de un año de la edad.

-Se pueden distinguir dos grupos de pacientes:

  • Sintomático: hay previamente signos de afección cerebral o por una causa conocida.
  • Criptogénico: ausencia de signos de afección cerebral previa y causa desconocida.
La causa de los espasmos infantiles es muy variada y casi siempre consecuencia de una lesión cerebral que puede ser estructural o metabólica. Existen otros casos cuya causa es desconocida (llamados criptogénicos), pero estos van disminuyendo según avanzan las técnicas de diagnóstico y se puede conocer.
Se puede considerar que cualquier lesión en el encéfalo (parte del cerebro) que afecte al niño puede ser el desencadenante de un Síndrome de West:
  • Isquemia antes del nacimiento o, incluso, durante el mismo.
  • Desórdenes dentro del útero, especialmente infecciones como la toxoplasmosis, la rubeola y los citomegalovirus.
  • Disgenesias (desarrollo defectuoso) cerebrales.
  • Desórdenes metabólicos: no es muy frecuente pero hay algunos casos relacionados.
  • Otras causas de origen infeccioso, como el herpes.
  • Una enfermedad llamada esclerosis tuberosa, que es una afección congénita del cerebro que se caracteriza por la presencia de numerosos nódulos y que clínicamente se manifiesta por trastornos mentales, ataques epilépticos y, a veces, tumores en la piel, riñones, etc.

-Los síntomas típicos son:

A) Espasmos flexores, extensores y mixtos: Consisten en contracciones súbitas generalmente bilaterales y simétricas de los músculos del cuello, tronco y extremidades. La contracción más típica es la de flexión. La duración aproximada de cada episodio es aproximadamente de 2 a 10 segundos, durante la cual puede haber ausencia. Los espasmos pueden acompañarse de:

    1. Alteraciones respiratorias.
    2. Gritos.
    3. Rubor.
    4. Movimientos oculares.
    5. Sonrisa.
    6. Muecas
    • B)Retraso psicomotor: Hay pérdida de habilidades adquiridas y anormalidades neurológicas como:
    1. Diplejia (parálisis que afecta a partes iguales a cada lado del cuerpo).
    2. Cuadriplejia (parálisis de los cuatro miembros: tetraplejia).
    3. Hemiparesia (debilitamiento o ligera parálisis de una mitad del cuerpo).
    4. Microencefalia (cabeza pequeña)
    C)Electroencefalograma característico: Enlentecimiento y desorganización intensos de la actividad eléctrica cerebral, que se conoce por hipsarritmia.
    • En el curso del proceso, los lactantes pierden la sonrisa, abandonan la prensión de los objetos y seguimiento ocular. Se vuelven irritables, lloran sin motivo y duermen peor.
    • Disminuye el tono muscular y si la situación se prolonga, el deterioro es importante.
    • Es frecuente que en muchos pacientes el retraso mental se manifieste antes que los espasmos; estos casos, en general, se consideran como probablemente sintomáticos.

    -Pronostico: 


    • Espasmos masivos infantiles.
    • Retardo o deterioro del desarrollo psicomotor y/o mental.
    • Alteraciones electroencefalográficas, usualmente del tipo de la hipsarritmia.


    Trastornos desmielinizantes.

    Trastornos desmielinizantes. 

    La inmensa mayoría de recién nacidos llegan sanos a este mundo. Pero a veces los lactantes desarrollan trastornos ya que sus sistemas inmunitarios no están suficientemente maduros para hacer frente a las bacterias, virus y parásitos que provocan las infecciones, que hacen necesario practicarles pruebas médicas y aplicarles los tratamientos adecuados.

    Estreptococos del grupo B:


    Los estreptococos del grupo B son un tipo de bacterias bastante frecuente que pueden provocar diversas infecciones en los recién nacidos. Entre las más frecuentes, cabe mencionar la septicemia, la neumonía y la meningitis. 
    Los bebés suelen contraer la infección a partir de sus madres durante el parto —muchas mujeres embarazadas tienen estas bacterias en el recto o la vagina, desde donde las pueden contagiar fácilmente al recién nacido. 
    Los bebés con este tipo de infecciones a menudo presentan signos de infección durante la primera semana de vida, aunque algunos no desarrollan ningún síntoma hasta al cabo de varias semanas o meses. Dependiendo del tipo concreto de infección (neumonía o septicemia, por ejemplo), los síntomas pueden incluir dificultad para respirar o para alimentarse, fiebre alta, rigidez o inquietud inusual.

    Listeriosis:


    La infección por la bacteria Listeria monocytogenes puede provocar enfermedades como la neumonía, la septicemia y la meningitis en los recién nacidos. 
    Los bebés pueden contraer la listeriosis si sus madres se contagian durante el embarazo. En los casos más graves, la listeriosis puede provocar un parto prematuro o de un bebé muerto. Los bebés que nacen con listeriosis pueden presentar signos de infección similares a los provocados los estreptococos del grupo B.

    Infección por E. coli: 


    Escherichia coli (E. coli) es otra de las bacterias responsables de algunas infecciones neonatales habituales y puede provocar infecciones del aparato urinario, septicemia, meningitis y neumonía. 
    Todo el mundo tiene bacterias E. coli en el cuerpo, y los bebés se pueden infectar durante el alumbramiento al pasar por el canal del parto o al entrar en contacto con las bacterias en el hospital o en casa. La mayoría de recién nacidos que enferman al contraer una infección por E. coli tienen sistemas inmunitarios especialmente débiles que los hacen especialmente proclives a contraer infecciones y a enfermar.

    Meningitis: 


    La meningitis es una inflamación de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal. Puede estar provocada por virus, hongos y bacterias, incluyendo Listeria, los estreptococos del grupo B y E. coli. Los recién nacidos pueden contraer uno de estos patógenos durante el parto o bien del entorno, particularmente si tienen un sistema inmunitario debilitado que los hace más proclives a las infecciones.

    Septicemia: 


    La septicemia es una infección grave y generalizada en la cual los gérmenes se extienden por la sangre y los tejidos del cuerpo. Puede estar provocada por virus, hongos, parásitos o bacterias. Algunos de estos agentes infecciosos se adquieren durante el parto, mientras que otros proceden del entorno del recién nacido.






    Las infecciones neonatales que no se tratan precozmente o que se extienden por el organismo del bebé pueden tener graves consecuencias. Puesto que el cuerpo y los órganos de los recién nacidos experimentan un rápido desarrollo, cualquier interrupción de ese proceso puede provocar complicaciones, incluyendo problemas de crecimiento y desarrollo, neurológicos, cardíacos, respiratorios y sensoriales. En algunos casos muy graves, las infecciones neonatales pueden ser mortales.


    Infecciones víricas o persistentes: Rubéola.

    Rubéola. 


    Es una infección que afecta prioritariamente a la piel y los ganglios linfáticos, generalmente se transmite mediante la inhalación de gotitas procedentes de la nariz o la garganta de personas infectadas. También la puede transmitir una mujer embarazada a su hijo antes del nacimiento que puede provocar un síndrome de rubéola congénita en el feto en proceso de desarrollo.
    Cuando una mujer embarazada contrae la rubéola, puede provocar en el feto un síndrome de rubéola congénita, con consecuencias potencialmente devastadoras para el bebé en proceso de desarrollo. Los niños que contraen la rubéola antes de nacer corren el riesgo de presentar retraso del crecimiento; deficiencia mental; malformaciones en el corazón y los ojos; sordera; y problemas en el hígado, el bazo y la médula ósea.

    Infecciones víricas o persistentes: Sarampión.


    Sarampión. 




    El sarampión es una enfermedad viral sumamente contagiosa, es causado por un tipo de virus denominado paramixovirus.

    Los síntomas se podrían presentar en el bebè de la siguiente manera: 

    • Comenzará con fiebre.
    • Su nariz le goteará mucho.
    • Tendrá tos.
    • Sus ojos estarán colorados y llorosos.
    • Es probable también que tenga poca energía y poco apetito.
    Días después, seguramente aparecerán las típicas manchas en la boca, especialmente en las membranas mucosas que cubren sus mejillas. Dicha reacción se conoce como las manchas de Koplik, que se manifiestan como pequeños puntos blancos similares a los granos de sal o de arena sobre granos rojizos. 

    Posibles complicaciones: 

    La mayoría de los niños saludables se recuperan del sarampión sin problemas. Pero alrededor de un 30 % de los casos de sarampión, el niño manifiesta algún tipo de complicación, que incluyen: 

    • Un 8% de los niños desarrolla diarrea (la cual también puede aparecer antes y con menor severidad, como un síntoma de infección).
    • La neumonía ocurre en 6% de los casos de sarampión. Entre las complicaciones que se desarrollan con el sarampión en los niños, la neumonía es la causa que más comúnmente termina en muerte.

      Otras dificultades menos probables incluyen: 

    1. Hepatitis.
    2. Miocarditis (inflamación del corazón).
    3. Meningitis.
    4. Encefalitis (inflamación del cerebro).

      En muy pocos casos, se presentan otras complicaciones serias a nivel cerebral.



    Encefalitis.

    Encefalitis. 



    Es un proceso inflamatorio del sistema nervioso central, asociado a una evidencia clínica de una disfunción neurológica. 
    Es la irritación e hinchazón (inflamación) del cerebro, casi siempre debido a infecciones. La encefalitis es una enfermedad poco común. Se presenta casi siempre en el primer año de vida y disminuye con la edad.
    La causa más frecuente de la encefalitis es una infección viral. Muchos tipos de virus la pueden provocar, como:
    • Sarampión
    • Paperas
    • Polio
    • Rabia
    • Rubéola   
    • Varicela
    La encefalitis causada por el virus del herpes simple es la causa principal de los casos más graves en todas las edades, incluso en los recién nacidos.

    La infección suele afectar al cerebro y a estructuras próximas al mismo como meninges (meningoencefalitis), pudiendo en otros casos afectar exclusivamente al cerebro (encefalitis) o a la médula espinal (mielitis o encefalomielitis).